Convencidos de la importancia de la labor que desarrollan los docentes, la FAD instituyó en 2004 el Homenaje al Maestro con el fin de que la labor del profesorado sea reconocida, valorada y apoyada por el resto de la sociedad.
Con motivo de la creación del Homenaje al Maestro, la FAD solicitó a J.A. Marina la redacción de un “Manifiesto del Maestro”, del que podéis leer un extracto a continuación:“De los recuerdos de nuestra infancia emerge siempre la clara figura de una maestra o de un maestro, con quien tenemos pendiente una deuda de gratitud. Suele ocurrir que tardamos mucho en darnos cuenta de su influencia benefactora, y para entonces aquellas personas que sirvieron de puente entre la familia y la sociedad, que suavizaron el desamparo de los primeros días de escuela y nos llevaron de la mano por los laberintos del abecedario y la cultura habrán desaparecido ya de nuestras vidas. Un homenaje al maestro puede servir para pagar esta deuda de gratitud. Es por ello un acto de justicia poética.”
Sin embargo, cada vez se hace más compleja la tarea de los docentes por los competidores que tiene la escuela (medios de comunicación…), por la actitud negativa de algunos alumnos, por el “pasotismo” de algunas familias… No es fácil, pues. Por eso hay que ayudar (la sociedad, la política, las familias…) a que estos profesionales puedan ejercer su tarea de una manera competente. Así, que instituciones privadas se preocupen y pongan especial interés en mejorar la educación es un ejemplo de lo que todos tenemos que hacer en la medida de lo posible pues es la sociedad entera la que educa y cada uno de nosotros forma parte de ella.